Rosario la chiquetita: ¡oy, niña…qué frío tengo má grande metio en el cuerpo!
Encanni: No va a tené vd., frío..¡mi arma!...ande y arrímesse vd., a la copa…que paresse que la guele (cago en la leshe..¡como viene hoy de cargá!...verá tú cuando se le recaliente er jigo”…¡ay, Dio mío…Dio mío…qué crú!
Rosario la chiquetita: ¡aaaaayyyyyy…ayyyyyy..ayyyyyyyyy!
Encanni: ¿qué la passao ahora…por Dio…que paresse que va a cantá vd. Una saeta?
Rosario la chiquetita: ¡¡ayyy…ayyyy …qué doló má grande, Encanni, que io a cogé la paleta por la parte que está adentro der brasseroooo..ayyyyyyy!
Encanni: ¡ay que vé hay que vé..hay que vé..hay que vé..hayyy que véeeee!...chiquilla que no sepué hasse carrera de esta mujen. ¡Po hija a vé si con la quemadura, se le purifica la peste que lleva vd., enssima!...¿no dissen que er fuego cura, po avé si é verdá?.
María Montero: ¡que passa Encanni…qué ha passao!
Encanni: ¡que va a passá…que va a passá..esta mujen que con er “chocheo” ha cogío la paleta der brassero –pero de endentro der brasseo-, y sá en chicharrao la mano…
María Montero: ¡ay por Dio, via llegarme por el “arcool” pa desinfectarla!
Encanni: ¡pa desinfectarla ha disho vd.,…pá desinfectar a la Rossario, se nississita una pissina llena de aguaorssiginada!...por cierto, María, con vd., quería yo hablá prississamente der Confressionario que ha montao D. Servando, vd., que está má metia que yo en la parroquia y conoce lo trememaneje del ojcurantijmo de lor Cura…
María Montero: Po mire vd., Encanni, yo lo único que lepueo dessí a vd., é que er confressionario é una preciosidad…con una lusse y uno adorno maravillosso, maravillosso, maravillosso..¡vamo! tó lo que le pueda dessi a vd., é poco..esso hay que velo para creelo; tiene hasta su hilo música..¡con unar marcha prossessionale, que quitan er sentío…
Encanni: ¡ay, María, pero si a mí ma disho la “Pepita de lo jamone” que esso paresse la casseta delinfienno, con unas llamas que salen de la parede y larssobirpo con su crú menassando a muerte como si fuera er “Torcremada” de la inquirssission…
María Montero: ¡ande vd., ya mujen..ande vd., ya…que vá…que vá!..Don Servrando é mu leido y múimportante…además te pone como ejemplo siempre, casso viridico –como Paco Gandía- de pecadore corrurto, que andan por la crofadia y que vd., y yo sabemo, como er “repeinao, el gomina”; er der nuo gordo; er soprana; er massimu…y sobre todo musho, musho, pero que musho afonicos: que son los que Monsseñó disse que van de tapadillo, que no dan la cara…vamo, de los que tiran la mano y esconden la piedra…
Encanni:¡Oy…María..que me está contando…me está dejando vd., pretificá..vamo que la Guatire no me llega ar cuerpo: entosse, ¿don Servrando esse é como “el humilladero”, que te dejá humillao y siente vreguenssa ajena…
María Montero: Sí, encanni, porque vd., sabe que hay musho frikale de passo estirado que aparessen en la afoto de la crofadia, pa figurá y se dedican aluego a pirateá en lor froro y parjina del internete esse.
Encanni: y que vd., lo diga, María, que lleva má rasson que un santo. Mire vd., mi “antoñito” ma disho a mí, que hay uno que disse vivi en triana y aluego donde vive en er polingano, que yo no se cuanta vesse ha serrao y abierto su blor…chiquilla que aparesse y desaparece como er Guatemala…
María Montero: ¿ay si yo le contara, Encanni y vd., entendiera má der tema..ve si un dia se atera y no metemo un ratito en elordenadó de Antonio er sacrirtan..¡ya verá vd.,..ya…se vaecha la mano a la cabeza!
Encanni:¡ay…hablando de cabeza..que dejao puerto er potaje en laornilla y guele a pegaooooo!....
Despejando dudas.
ResponderEliminar