APADRINA A UN TIESO

Así como el que no quiere la cosa, hemos coronado la cima de Enero, el antiguo mes de la famosa “cuesta”. Parece mentira que le hayamos perdido el respeto a la “cuesta de Enero” –con lo que era- y ya no sea más que un sucedáneo comparable a Septiembre, Octu, Nov, Dici, Febr, Marz, Abril, May, Jun, Jul y Agos. Todo se nos ha hecho ya una enorme cuesta, dada la “tiesura” que padecemos con la crisis de los últimos de filipinas –digo – UE, de la cual somos distinguidos presidentes y anfitriones, con lo que eso representa para el común de los parados. Cuesta abajo y sin freno, bajaremos Enero, mientras achicamos agua y vamos arreglando los papeles a ver si nos indemnizan por víctimas de la zona catastrófica. todo el mundo va buscando una indemnización –de eso vivimos- o mejor dicho, malvivimos: de una indemnización por despido, de un subsidio por desempleo; de una ayuda familiar; de un salario social; de una pensión por discapacidad, por larga enfermedad, por gran enfermedad, por orfandad, por viudedad. Los virtuosos que trabajan por méritos propios (vulgo funcionarios), creyentes en dios porque lo ven en una nómina fija al mes, ó los privilegiados que guardan su empleo como oro en paño y el mojón en el culo, porque cada día trabajan más y cobran menos, pero por lo menos – x - = + y las matemáticas no mienten sobre todo a la hora de pagar la hipoteca. De los empresarios, mejor ni hablar y de los pequeños autónomos: una verdadera especie en extinción, cuya paciencia y heroicidad, rebasa las fronteras de lo imposible. En los malabares de tanto despropósitos juntos y en un intento a la desesperada por tratar de compensar el déficit, los próceres del gobierno responsable de la economía, se salen por la tangente de la "economía sumergida"...del fraude a la Seguridad Social, de la prestación indebida por desempleo; de la contratación ilegal...en una palabra, del “mal menor y necesario” que supone poder sobrevivir al margen de una ley y poderes públicos incapaces de impartir justicia social….¡ay! –alma de cántaro- como dirían los compadres: “eso es asín…” de lo contrario estarían los -1000 euristas, pegando tiros por la calle y desvalijando hipers, para comer. Si no fuera por esa economía sumergida de los desempleados, o de los empleados basura y la ayuda inestimable de sus padres, suegros y hermanos, no habría más prensa rosa que la que se vé en los programas de “callejeros” para amenizar las sobremesas infumables de este país de “tiesos”. Lo que tiene que hacer el Sr. que tiene las cejas apuntando al limbo, es recuperar de una vez por todas los millones de euros que se han “birlao” por la cara, los ladrones de guante blanco de esa otra macroeconomía sumergida de los casos “bunker, malaya y demás mangantes de corbata, que continúan paseándose impunemente por los platós de las mejores televisiones basura. Ay, si los viéramos algún día, realizando trabajos sociales en plena calle, vestidos con el uniforme fluorescente de los más dignos empleados de limpieza –pero sin cobrar ni un duro- …con lo que era antes la cuesta de enero.